Los españoles no podemos hacernos cargo de los africanos, de los políticos, de sus familiares, de las asociaciones, de los cineastas, de los empresarios, de las agricultoras de la vertiente oriental del Perú, de los niños palestinos, de los cantantes de soul, de los sindicatos, de los pensionistas, de los mineros, de los paneles solares, y de las putas del PSOE.