Es fácil atacar a la Iglesia por el dinero que recibe, pero olvidamos fácilmente todas las escuelas, hospitales y obras de caridad que sostiene con esos fondos. ¿Cuántas escuelas, hospitales y obras de caridad hacen tus tetas?
La crítica debería ser constructiva, no una excusa para desviar la atención de otros problemas.