"Murió mientras dormía la mañana de Navidad de 2016. Solo tenía 53 años. Y, sin embargo, incluso después de su muerte, George Michael sigue salvando vidas.
Fue entonces cuando se supo lo que siempre había mantenido en secreto: había donado millones de libras a huérfanos, personas sin hogar, enfermos y familias necesitadas. En silencio. Sin cámaras. Sin necesidad de aplausos.
Una concursante de un programa de televisión dijo que soñaba con tener un hijo, pero que no podía permitirse un tratamiento de fecundación in vitro.
Al día siguiente, encontró 15.000 libras en su cuenta.
Se las envió, sin mencionar su nombre. Trabajaba en refugios para personas sin hogar, disfrazado de voluntario. Cada Semana Santa donaba 100.000 libras a asociaciones infantiles. Una vez, vio a una mujer llorando en un bar por sus deudas. Extendió un cheque por valor de 25.000 libras y se lo dejó a la camarera, con una única instrucción: - Entrégaselo cuando me haya ido.
Pagó estudios, tratamientos, sueños. Financia centros para personas con VIH. Ofreció un concierto gratuito para las enfermeras que habían tratado a su madre.
George Michael no buscaba la fama. Buscaba la humanidad. Y quizá por eso, aún hoy, cientos de miles de personas viven gracias a él."
Visto en la web