Esto es la clave. El que dimite, Mazón, es que el cometió un error que no hubiera cambiado sustancialmente lo ocurrido aquel día.
El que sigue en el cargo, Pedro Sánchez, el indecente sin escrúpulos, dispuesto a pasar por encima de todo y todos y utilizar una tragedia con más de 200 muertos para sus cálculos políticos. Un tipo siniestro que abandonó y mantiene abandonados a los valencianos por el mero hecho de que votaron a quién él no quería.