Vamos a ver, USA tiene al 25% de la población así y es primera potencia mundial
HUMANIDAD, POR FAVOR
Hombre de mediana edad sentado en la acera. Delante, un recipiente de plástico para la limosna. A su lado, un trozo de cartón: “Soy español, tengo una niña de siete años, necesito trabajo. No tenemos ni luz ni agua corriente. Ayuden, por favor. Humanidad. Te puede pasar a ti. Juro que es la verdad.”
Y pasa la gente. Algunos miran, otros fingen no ver. España, cuarta potencia económica de la Unión Europea según el FMI. La misma España que reparte millones en ayudas internacionales y propaganda, asesores y ministerios inútiles, pero que deja a un padre y su hija sin agua, sin luz y sin esperanza.
No es una imagen aislada: es un espejo. Un país que permite esto no es moderno ni social, es simplemente indolente. La miseria se ha normalizado tanto que ya no indigna; solo incomoda.
Y mientras tanto, los que gobiernan se felicitan por el Ingreso Mínimo Vital, las cifras del PIB y los nuevos récords de “solidaridad institucional”.
Humanidad, decía el cartel. Eso es justo lo que falta.