Hoy muere Dick Cheney: el arquitecto de la invasión ilegal de Irak, que destruyó los últimos vestigios del Cristianismo en gran parte de Oriente Medio y sentó las bases para la invasión migratoria islámica de Europa. Su desastrosa guerra contra Irak, presionada por el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y basada en una mentira de inteligencia sobre supuestas "armas de destrucción masiva" (ADM) en posesión de Saddam, provocó el genocidio de 1,5 millones de cristianos iraquíes y creó el vacío de poder que terroristas verdaderamente islámicos como ISIS y Al-Nusra llenarían, y que hasta el día de hoy devastarían a las comunidades cristianas más antiguas que aún sobreviven en el Levante.
Murió como "héroe nacional" en un mundo bajo la garras del sionismo, pero ahora enfrenta la verdadera justicia ante Cristo Rey.
– 2 Corintios 5:10: "Porque todos nosotros debemos comparecer ante el tribunal de Cristo, para que cada uno sea recompensado por sus hechos estando en el cuerpo, de acuerdo con lo que hizo, sea bueno o sea malo".