SE HUNDE EL MIAMI DEL CARIBE
Hace unos meses conversaba con una maestra del sector público de la República Dominicana, a la cual escuché quejarse y plantear su decisión de abandonar la docencia, según ella por la indolencia y falta de interés que tenían los padres y madres en cuanto a la educación de sus hijos.
Me hablaba esta "profe" de que los progenitores no hacían caso a las convocatorias a reuniones de padres y maestros, y mucho menos ponían atención a las tareas escolares, pues la esperanza económica de los pobres ahora se ubicaba en los puntos de drogas, las bancas de apuesta y el fraude digital.
Entre tantas informaciones inconexas, y usando como base la queja de la maestra, hay dos que hoy me llaman la atención; la caída de la RD en el ranking de la medida del PIB durante este año, que es de un raquítico 2.20%, el más bajo de centroamérica y el segundo más bajo de Latinoamérica.
La otra información es un mapa que publica el Listin Diario y titula "la ruta de la droga", que toma como base la confesión de un regidor del PRM y un Gral. (r) de la policía que se declararon traficantes de droga en la Florida, y traza las estaciones del delito: Colombia producción, RD almacenaje, Florida venta, RS dinero.
Quizás ya está llegando la hora de preguntarmos hasta que punto nuestra producción medida en terminos de PIB ha dependido de la importación, almacenamiento, venta y posterior reingreso de capitales para sea lavado en nuestro sistema bancario, esto más que una posibilidad es una certeza a la luz de datos que son muy reveladores.
Es que de repente en la RD hemos sufrido una invasión de noticias que nos cuentan del destape de nuestra sociedad al trafico de drogas, ya no hablamos de unos pobres diablos analfabetos desconocidos, ahora nos encontramos con personajes de la alta sociedad, con apellidos ilustres, algunos vinculados a las industrias de zonas francas, es decir a grandes capitales.
Las señales de que han invadido los partidos políticos sobran, y lo más representativo son los ayuntamientos y el congreso de la nación, es normal en la RD congresistas que surgen del mundo del juego, individuos en el senado que han estado presos por narcotráfico y las sospechas de que vivimos una invasión de personas vinculadas al crimen en los poderes públicos.
Con este panorama; un gran ejército de jóvenes de los barrios trabajando para los narcotraficantes a la orden de los jefes territoriales, personajes desconocidos de la clase alta recibiendo los beneficios y la inversión o lavado de esos capitales en el mundo del juego, las bancas de apuesta y la banca formal, nos hemos mantenido creciendo sin parar como país.
Solo que en el 2025 llegó como de sorpresa el punto de inflexión, en nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha tomado como una prioridad, y con toda razón, el combate frontal y con todos los medios a su alcance al trafico de drogas, negocio que sufre en forma primaria su país que es el mayor consumidor del mundo.
Sin dudas en muchos aspectos Trump ha.cambiado las reglas de un juego que ha llevado a la tumba a millones de jóvenes, pero al mismo tiempo ha creado un serio problema a las redes de narcos traficantes de esta región, que ahora se sienten angustiados al no saber cuál de ellos será el próximo pedido en extradición y esta red incluye desde personajes de poca monta, hasta grandes banqueros y empresarios.
En mi caso, que tengo la mala costumbre de siempre pensar mal, parece que la repuesta a mi pregunta de cómo un país que no produce nada, que los ingresos del turismo se quedan en los bolsillos de las grandes operadoras y las cadenas hoteleras que ninguna pagan impuestos y que sus nacionales trabajan en los sectores con salarios más deprimidos del primer mundo, podían mantener ese alto crecimiento en tiempo tan prolongado.