Colaboración:
@NetflixES
Storyteller: Jess Martínez-Bordiú
Hay películas que no solo se ven, se quedan contigo.
The Shawshank Redemption es una de ellas.
No necesita gritar para dejar huella. Es silenciosa, pero implacable.
Habla de lo invisible: la fe, la esperanza, la resistencia.
Andy no escapa con rabia, sino con paciencia.
Pulveriza una pared un puñado de polvo cada día,
creyendo, sin pruebas, en algo mejor.
Eso es lo que me conmueve: el desafío que no se anuncia,
la libertad que empieza en la mente mucho antes de tocar el mar.
Y luego está Red, aprendiendo que la esperanza no es ingenua,
es lo único que puede salvarte sin tocarte.
Cada frase, cada plano,
te recuerda que sobrevivir también puede ser un acto de arte.
Y que incluso en el lugar más gris,
si mantienes la mirada limpia,
aún hay un azul esperándote.